lunes, 18 de octubre de 2010

Libro electrónico

Personalmente no creía mucho en el uso del libro electrónico dada nuestra sociedad, sin embargo casualmente el otro día observé a una señora leyendo con su libro electrónico en medio de un parque, quizás ese sea el punto de inflexión para empezar a cambiar de opinión acerca de estos “libros”.

El libro electrónico tiene varios distribuidores, creando competencia claro, como lo son Apple, Samsung y Sony. Estas empresas se han metido de lleno en el lanzamiento y margen de mejora progresiva de los libros electrónicos, también denominados e-books.

Sony ha optado por satisfacer al usuario o consumidor específico, es decir, el que usa el libro electrónico exclusivamente para leer ya que existe otro sector del mercado cuyos usuarios usan el libro electrónico, en este caso el Ipad, para otras funciones.
La idea de Sony, y estoy a favor, es la de explotar el libro electrónico (Reader) para los que realmente van a darle su verdadero uso, y así introducirse en un mercado determinado e innovar, obteniendo mejoras que satisfagan a sus usuarios. Su funcionalidad tienes ciertas características como la de un abanico de tamaño de letra del que dispone, posibilidad de subrayar y anotar, al igual que la tinta electrónica no afecta a la posible fatiga de la vista, un peso liviano para permitir su movilidad y un almacenamiento que alcanza un máximo de 12.000 o 19.000 libros digitales, según qué Reader se trate.

Sony ha lanzado su Reader hace no mucho ya que la demanda de libros electrónicos en España no ha sido lo suficientemente abundante para poder rentabilizar el lanzamiento de producto al contrario que EE.UU donde el consumo de libro electrónico está en aumento y cuenta ya con un gran número de usuarios.
Libranda, una de las mayores plataformas de distribución de libros digitales en España, está poniendo en marcha su proceso de distribución de libros digitalizados online para asi poder garantizar una amplia disponibilidad de ediciones.

Sin embargo, todo lo que tiene relación con un posible comercio electrónico tiene su defecto por antesala, la piratería.
Un estudio de Attributor concluye que la piratería de libros electrónicos está aumentando de manera significativa ya que mediante el uso de Google Trends y tras analizar las listas de Amazon, han notado un descenso en las búsquedas de contenidos legales ya que ciertos portales más pequeños disponían de contenido ilegal y procedían a su venta a un precio más reducido.
Solo se baraja la simultánea edición de las novedades que presenten los libros o ebooks para que no se produzca ningún conflicto y nadie pueda aprovecharse de digitalización de textos y su posterior venta.

Otro de los riesgos, que lo ha sufrido Libranda en sus propias carnes, es la falta de desarrollo de ciertas capacidades técnicas y que pueden provocar una mala imagen de marca de cara al usuario.
Libranda arrancó con problemas ya que los primeros compradores de ebooks han sido incapaces de que sus lectores electrónicos puedan leer los archivos descargados desde Libranda. Al menos dos de los dispositivos más populares, el Kindle de Amazon y el iPad de Apple no consiguen abrir los libros.
Estos son los riesgos que las empresas digitalizadoras han de procurar cuidar para que sus usuarios no se vean obligados a acudir a otro portal que no les plantee ningún problema a la hora de poder leer los libros descargados.

A juzgar por lo leído hasta ahora en este post, no fomento mucho la idea del uso del libro electrónico sin embargo, puedo resumir en pocos puntos y más concisos, para cambiar la opinión acerca de este producto:

El primero consiste en la disponibilidad y accesibilidad universal y mundial de este tipo de productos. Pocos productos podrán presumir de tal accesibilidad, ya que disponiendo de acceso a internet, hoy en dia accesible para cualquier persona, podrás disfrutar de los e-books mediante su descarga inmediata. Además, no sólo nos encontramos con la venta de libros sino que existen muchos ejemplares gratuitos, lo cual favorece la cultura y el aumento de futuras descargas al poder probar y disfrutar gratuitamente el libro electrónico.

Otro de los puntos a favor es la venta al precio mas “bajo” ya que al no existir papel y tinta, aquí no intervienen distintos distribuidores que buscan el mayor beneficio posible.

Y finalmente, y para mí lo más significativo en términos de uso, se abre un mundo de posibilidades y nuevas utilidades que con el libro de toda la vida no existe.
Cuando leemos un libro electrónico, hay ciertas necesidades del lector que son satisfechas de manera más rápida y más sencilla como son por ejemplo, la búsqueda de significado de palabras, poder realizar anotaciones o comentarios en el mismo libro, interactuar con demás personas acerca de un mismo libro o compartir opiniones y gustos gracias a su tecnología, ampliaciones de temas y bibliografías es decir, necesidades de un lector que están al alcance de la mano y que buscan la mayor comodidad y sencillez para el verdadero lector.

Para concluir, creo que la demanda del e-book es aún lento en nuestro país debido a su poco placer por leer libros, por el contrario, la tecnología es algo que cada día está más presente en nuestras vidas y la presencia del e-book, puede que dentro de algunos años, se hará notar y esperemos que eso fomente la lectura en España.

También apoyo a Sony en su idea de crear un producto adecuado a sus verdaderos usuarios (verdaderos lectores como dice el artículo), ya que profundiza en las mayores y más precisas necesidades de los lectores que ya he descrito anteriormente, creando una competencia sana ya que los mayores beneficiados de esta batalla por abarcar un nuevo mercado son los propios usuarios.

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